Parkinson, enfermedad que duerme en el cuerpo

Categoría: Reportajes Publicado el 10 Abril 2017
Escrito por Patricia Aguilar

Veracruz, Ver.- Sin antecedentes entre integrantes de su familia que hubieran presentado rigidez en su cuerpo, dificultad para caminar o trastorno gastrointestinal Carlos Platas Meneses vive desde hace seis años con una enfermad llamada Parkinson.
Meses atrás un accidente automovilístico despertó este padecimiento que mantenía "dormido" en su cuerpo que cuando "despertó" lo obligó hacer cambios en su modo de vida.
El incidente se registró cuando iba a bordo de su vehículo rumbo al estado de Tabasco, de repente el carril fue invadido de forma intempestiva por unas vacas que se habían salido de su corral, situación que lo obligo a salir de la carretera y terminara en el interior de su auto despedazado.
"Y a los siete meses empezó el Parkinson, esa es mi historia, no tengo familiares con Parkinson, se pensaba que era hereditario, sí hay un porcentaje pero es del 7 u 8 por ciento, cada vez es más frecuente verlo en personas jóvenes, que tras un evento inesperado puede dejarlos fuera de su vida normal".
Carlos Platas Meneses actualmente está casado, él al igual que su esposa tienen 44 años de edad, un matrimonio joven que es complementado con dos hijas adolescentes.
"Cuando comencé con el Parkinson yo me quería suicidar, le pedí a mi esposa el divorcio porque no la quería tener encadenada a esta situación, ella me respaldo, ha llegado a ser desesperante, pero vamos por buen camino. Manejo, voy a dejar a mis hijas a la escuela, a mi esposa a su trabajo, me dedico a mis actividades, salgo a cenar con amigos, voy a bailar, trato de hacer mi vida habitual" relata.
Y continúa: "Yo no estoy derrotado, hay momentos del día en que estamos más afectados, treinta minutos es lo que dura en hacer efecto el medicamento, el temblor no es por la enfermedad es por la medicina que tomamos y después pareciera que no tienes nada, me dura dos horas y media el efecto, me administro poco porque el medicamento da un efecto de luna de miel".
Desgraciadamente ese efecto tranquilizador ha sido motivo de burlas y humillaciones por parte de la gente que no está informada sobre el tema, llegando a ser objeto rechazo.
"En una ocasión iba manejando, venía acompañado de otras personas y nos retuvieron en un retén, acaba de tomar el medicamente y estaba sudando tenía mi crisis de movimientos involuntarios, el militar pensó que "actuaba" de forma sospechosa, revisaron la unidad, pero vieron que seguía igual, me preguntó que tenía y le dije que Parkinson, le fue a decir a su superior y regresó a pregúntame ¿Es contagiosa? Y le dije que sí, en ese momento nos dejó seguir nuestro camino".


He aprendido a adaptarme a vivir con la enfermedad: Antonio Herrera

José Antonio Herrera Cerezo, cuenta con 75 años de edad, su vida laboral la dedicó a impartir clases de educación artística en escuelas de educación pública y desde hace 5 años padece esta enfermedad.
"Yo desconocía todo lo del Parkinson y me puse a buscar en internet, en Wikipedia, ¿Qué es? ¿Cómo se combate? Y ahí supe que el Parkinson no es pasajero sino que se quedaría conmigo para siempre, a partir de ahí me puse a buscar ayuda y llegue a esta casa de asistencia donde me enseñaron que no es para curar el Parkinson sino para adaptarme a vivir con él".
Nuevamente el apoyo familiar ha sido un factor determinante para salir adelante; su esposa, María Félix Chávez, con quien ha compartido su vida y el apoyo de sus hijos han sido primordial para poder asimilar la presencia de esta enfermedad en su cuerpo: "Me ha dado el mayor respaldo que podía esperar, además del cariño, amor y compresión."


Todo comenzó con un temblor de mano

"A los 36 años comencé a caminar raro pero no le prestaba atención, incluso en mi trabajo se burlaban de mí", expresó Luz María Reyes, quien se dedica a dar rehabilitación física a las personas que acuden a la Casa de los Amigos del Parkinson.
En los últimos seis años, los mismo que lleva combatiendo la rigidez de su cuerpo con ejercicio y medicamente, le han permitido conocer más sobre la enfermedad y el tipo de actividades física que una persona con este padecimiento puede realizar.
"Fue a raíz de que me atropelló un camión, yo ya lo tenía pero no lo sabía, simplemente me lo aceleró, después del accidente me dijo el doctor posible Parkinson; me dijo, mira ¿Cómo te tiembla la mano?, ¿Cómo caminas? ¿No te habías dado cuenta?"
Ella al igual que otras personas pensó en suicidarse, tenía batallas y derrotas constantes contra la depresión, ahora a sus 44 años, cuenta con el respaldo de dos hijos que junto con ella poco a poco van conociendo en que consiste la enfermedad.
"Soy abuela y la enfermedad me ha impedido tener un contacto más estrecho con mi nieto, pero mi hijo le explica que estoy enferma y a su corta edad lo trata de comprender y me toma de la mano para ayudarme".
La Casa de los Amigos del Parkinson, que dirige Carlos Plata Meneses, es un espacio dedicado para enseñarles a las personas como vivir con esta "bendita" enfermedad, como ellos la llaman.
Se estima que en el municipio de Veracruz existan unas 300 personas con este padecimiento y una cantidad similar que prefiere mantenerla oculta.
"Desgraciadamente cada vez son más las personas jóvenes la que la padecen, una crisis de estrés, ansiedad, depresión, conflicto familiares, económicos, cualquier evento inesperado puede desencadenarla y que solo con valentía podemos abrirle la puerta a nuestra vida y vivir con ella", concluyó Plata Meneses.
Patricia Aguilar/Ecos de Veracruz.