“Mujeres luchonas”: no se felicita a la mujer por ser mujer

Categoría: Zona Conurbada Publicado el 08 Marzo 2018
Escrito por ecos

Por Rogelio Hernández

SexualidadEs

El Día Internacional de la Mujer como cada año podría pasar desapercibido y volverse banal como otras tantas conmemoraciones para finalmente convertirse en un Día de las Madres o 14 de febrero (solo por citar algunos), donde el comercio haga de las suyas, y se pierda el verdadero sentido.

Debemos recordar que hoy no se regalan abrazos, chocolates, flores y felicitaciones, hoy se respeta y reconoce el trabajo de las mujeres y la lucha por habitar un mundo equitativo, donde no tengan que hacer cosas sólo porque la sociedad se los pide, sino que en verdad ellas así lo deseen.

 

Por ahí he leído que este 8 de marzo algunas mujeres no quieren que las feliciten, ya que con que no las insulten, acosen, violen o maten es suficiente, pero no, no es suficiente. Mientras nosotros como sociedad no entendamos que la cultura nos está llevando a una convivencia que no es apta para todos, lo que podemos hacer es reconocer que ellas, las mujeres, ya sean biológicas o por identidad de género tienen menos beneficios que los hombres no podremos decir que hemos avanzado.

Dice Simone de Beauvoir que “No se nace mujer, se llega a serlo”, y de acuerdo con ella, es la sociedad la que hace mujeres y con ello un estereotipo que todos manejamos, así es como en la sociedad hay frases machistas (dichas por hombres y mujeres) como, “date a desear”, “deberías ser más femenina”, “las niñas bonitas no dicen groserías”, “a las mujeres no hay que entenderlas, sólo amarlas”, “seguro estas en tus días”, “hay que educar a las mujeres para que no se dejen pegar”, “el hombre llega hasta donde la mujer quiere”, “como va a casarse sino sabe cocinar”, “necesitas una buena cogida para que estés de buenas”, y cuando son acosadas o violadas escuchamos “seguramente fue su culpa, por vestirse así”, en estas frases vemos como las mayor responsabilidad recae en las mujeres y la debilidad es considerada como femenina, por ello es que la sociedad es la que hace a las mujeres con frases como las anteriores, por ello es que las mujeres son obligadas a ser madres, no es que algunas no lo quieran, sino que han escuchado que para ser mujer plena deben tener familia (esposo e hijos) o serán mujeres “fracasadas”.

En el Día Internacional de la mujer nos sumamos porque no se felicite a la creación más bellas de dios (machismo) sino a quienes han luchado por los derechos de las mujeres; hoy no se festeja a los seres hermosos y dadores de vida (machismo), sino que debemos recordar que a pesar de muchos avances, aún las mujeres siguen muriendo por el hecho de serlo; hoy no felicitamos a las mujeres dueñas de nuestros corazones (para eso tienen el 14 de febrero, comercial por cierto), hoy debemos sumarnos para resolver tanta inequidad en el mundo, debemos pedir no a la violencia de género y buscar un mundo más justo.

Porque el 8 de marzo de habla de una conmemoración y no de una celebración, porque desde el enfoque de los derechos humanos este día es para reconocer las desigualdades que enfrentan las mujeres en la sociedad, cultura, política y económica. Lo que entendemos por mujer (coqueta, frívola, caprichosa, salvaje o sumisa, obediente, cariñosa, etc.), es un producto cultural que se ha construido socialmente.

Además, que es una fecha para reconocer el aporte que las mujeres han hecho a la política, la economía, cultura y la sociedad en general, no se celebra dado que este día nace del crimen de unas obreras textiles que por exigir derechos laborales fueron asesinadas. Por lo tanto, no se felicita a las mujeres por ser mujeres, como tampoco se felicita a los hombres por ser hombres.

Estamos acostumbrados que en redes sociales se hagan “memes” de mamás luchonas, nos reímos sí, pero no nos damos cuenta de la violencia que lleva en el mensaje, ya que al darles tantos calificativos las demeritamos en su trabajo, el verdadero trabajo que hacen, ese que es de dos o más jornadas, porque después del trabajo lavan trastes, son quienes deben preparar la comida, atender las enfermedades de padres, hermanos e hijos y esposo si están en pareja.

Vamos más allá y podemos ver parejas donde el hombre dice yo si soy feminista y apoyo la equidad de género, le ayudo a mi esposa con los hijos, con la comida, y eso, eso es machismo o un mal entendido de lo que significa igualdad, porque en cada familia es obligación de los dos el sustento y organización del hogar y no, no ayudas, haces lo que te corresponde, así que no te mereces las palmas de oro.

Algunos hombres (que muy pocos) se preguntan entonces que hacer, bueno pues entre lo que sería recomendable es que entre amigos hablar del tema, y no hacer chistes misóginos, si eres padre encárgate también de tus hijos, no como una ayuda, sino como una responsabilidad, además de relevar a las mujeres cuidadoras.

En muy importante reconocer también que el Día Internacional de la Mujer y el feminismo en general también lucha porque los hombres pueda llorar y expresar libremente sus sentimientos y no les digan “maricón o niña”, para que no se sientan obligados ser sostén de una familia, sino que en pareja puedan dotar de lo necesario al hogar, para que pueda trabajar y dedicarse a lo que realmente les gusta y no sea un estereotipo ser estilista, enfermera o ingeniero, para que puedas vestirte del color que te de la puta gana y el azul o rosa no sea exclusivo de un género, para que no te sientas incomodo si una mujer te dice que le gustas o te invita a salir, para que los hombres no sean súper héroes y vivas libre de prejuicios.

Las mujeres siguen en el combate para ser ellas mismas y en consecuencia los hombres también, siguen construyendo una felicidad que sea una verdadera decisión y no una imposición cultural y por supuesto una identidad personal.